03 enero 2012

Palabras... Sólo Palabras



Estoy probando si funciona esto de postear vía mail. De ser así, me soluciona la vida en cuanto a mantener mis blogs actualizados (que sí, he tenido harto botados), pero es mi propósito de año nuevo solucionar esta situación... Si esto no funciona tendré que aplicar un "blogueo" con desfase: escribir en una libreta y traspasar después, pero es una solución que no me termina de satisfacer. Mis razones para escribir tienen que ver bastante con el desahogo (emocional y también de ideas obsesivas, irritantes y persistentes) y no sólo con la difusión per se de pensamientos, sentimientos y "pelás de cable".

Escribir algo dos veces es un desahogo reiterativo, poco efectivo y a veces hasta contraproducente. Es la razón por la que tengo entradas escritas que nunca han sido publicadas, y probablemente no lo serán jamás (he tenido mis blogs botados... nunca dije que tuviera la escritura abandonada). Hay cosas que deben ser escritas, depuradas del sistema, y olvidadas tan pronto como fueron liberadas y dejaron de pertenecerte realmente. Porque las palabras son tuyas hasta que las liberas a través de la voz o la escritura y en ese minuto pasan a ser de tu interlocutor/lector o a falta de uno, pasan a formar parte de un limbo de palabras, nunca oídas, jamás leídas. Esas últimas son palabras libres pero sin propósito más allá de su mera existencia. Palabras que nacen sólo por nacer, como hijos no deseados. Qué triste puede ser eso. Creo que por eso existen los blogs. Le dan sentido a ciertas palabras escritas a través de su difusión on line. Si alguien las lee cumplen su cometido. Alguien las adoptó. Quienquiera que las lea. Esté de acuerdo o no. El que oyó no puede desoir lo escuchado. El que leyó no puede desleer lo leído. Las palabras entregaron su mensaje. Bien o mal, pero al menos lo intentaron.

Creo que me fui por las ramas, para variar. Quizás fue para no hablar de esos "hijos no reconocidos". Esas cosas escritas que nunca verán la luz. Palabras que no me siento capaz de releer. Palabras que no me siento capaz de reconocer otra vez. Las palabras duelen. Incluso las propias. Quizás algún día ya no importe. No lo sé. Anyway, it doesn't matter.

Creo que para ser una prueba, es suficiente. Además ando de un ánimo demasiado oscuro y no quiero que la gente que me quiere se preocupe. Estoy bien, en serio. Estas son palabras... sólo palabras.

1 comentario:

Dr_Cucho dijo...

Espera un poco… ¿se puede postear vía mail?... cielos se me han abierto los ojos a un gran número de posibilidades, pero de todas maneras no creo que resulte muy bien debido a que siempre termino editando algo para que las entradas queden perfectas (bueno, editaba… ya ha pasado mucho desde la última vez que publiqué algo).
Escribir por segunda intención a mi no me resulta en lo absoluto… sería extraño pensar que en todo este tiempo no me ha surgido ninguna buena idea, muy por el contrario han surgido unas más que destacables pero el no tener el compu a mano para redactar, tiempo o incluso ganas, se han quedado en el tintero y tratar de plasmarlas después, no resulta. Cada palabra tiene su tiempo y contexto, lo que le da valor y sentido también… postergarlas solo hace que para mi tengan un sabor insípido y el plasmarlas en un lienzo improvisado, sólo para reescribirlas después se me hace como copiar un dibujo que ya he hecho pero que nunca quedará como el original (aunque no por eso ha de quedar mal, pero simplemente: “no es el original”).
La palabras son solo palabras, los mensajes creo que trascienden algo más… sea como sea creo que hoy terminé por adoptar un par de vocablos huérfanos, ¿no te parece?.